S.S. Juan Pablo II: El Jubileo

Introducción al jubileo (19.XI.97)

El Jubileo (I) » Reflexión sobre Cristo »
Descubrimiento de Cristo Salvador y Evangelizador
En el principio existía el Verbo (26.XI.97)
Cristo en la historia de la humanidad que lo precedió (3.XII.97)
La Encarnación, ingreso de la eternidad en el tiempo (10.XII.97
El tiempo del Evangelio (17.XII.97)
Con Jesús ha llegado la hora de nuevas relaciones con Dios (14.I.98)
Cristo, único Salvador (4.II.98)
Jesús viene a ofrecernos una salvación (18.II.98)
Descubrimiento del Bautismo
El bautismo, fundamento de la existencia cristiana (1.IV.98)
El sacramento del bautismo incorpora al hombre a la Iglesia (15.IV.98)
La orientación fundamental de la existencia cristiana (22.IV.98)
María Santísima
La alegría de María (29.IV.98)
La profundidad de la fe de María (6.V.98)

El Jubileo (II) » El Espíritu Santo
Contemplación del Espíritu Santo I(13.V.98)
La revelación del Espíritu Santo, como persona distinta del Padre y del Hijo (20.V.98)
El Espíritu Santo en el acontecimiento de la Encarnación (27.V.98)
«Dios a Jesús de Nazaret le ungió con el Espíritu Santo y con poder» (3.VI.98)
La revelación del Espíritu en la «hora» suprema de Jesús, la hora de su muerte y resurrección (10.VI.98)
Misteriosa identidad del Espíritu Santo (17.VI.98)
El Espíritu Santo, protagonista de la evangelización (1.VI.98)
El Espíritu Santo en el cuerpo místico de Cristo (8.VI.98)
El Espíritu Santo, «soplo» del Resucitado (22.Vi.98)
El Espíritu Santo, acción unificadora (29.VI.98)
Actitud de obediencia humilde al Espíritu (5.VIII.98)
El Espíritu Santo, actúa misteriosamente en los corazones y en la historia (12.VIII.98)
El Espíritu Santo es la verdadera esperanza del mundo (19.VIII.98)
El Espíritu Santo, vínculo de amor entre la eternidad y el tiempo, entre la Trinidad y la historia (26.VIII.98)
El Espíritu Santo, fuente de verdadera libertad (2.IX.98)
El Espíritu Santo, presente en las demás religiones (9.IX.98)
El Espíritu Santo guía incesantemente a los hombres hacia la plenitud de verdad y de amor que Dios Padre ha comunicado en Cristo Jesús (16.IX.98)
El Espíritu y los signos de los tiempos (23.IX.98)
El sacramento de la confirmación como coronamiento de la gracia bautismal impulsado por el Espíritu Santo (30.IX.98)
El valor salvífico y en el efecto espiritual expresados por el signo de la unción, que indica el «sello del don del Espíritu Santo» (14.X.98)
El Espíritu Santo, al igual que el Padre y el Hijo, es el protagonista del «evangelio de la vida» (21.X.98)
El Espíritu Santo como Espíritu de la vida (28.X.98)
El Espíritu revestirá de la gloria de Cristo nuestros cuerpos (4.XI.98)
Es preciso cruzar juntos el umbral de la esperanza (11.XI.98)
Los «signos de esperanza» presentes en nuestro mundo(18.XI.98)
Los «signos de esperanza» presentes en la Iglesia (25.XI.98)
La esperanza como espera y preparación del reino de Dios (2.XII.98)
María, Madre animada por el Espíritu Santo (9.XII.98)

El Jubileo (III) » La visión del «Padre celestial»
La figura de Dios Padre (16.XII.98)
El rostro de Dios Padre, anhelo del hombre (13.I.99)
La paternidad de Dios en el Antiguo Testamento (20.I.99)
La experiencia del Padre en Jesús de Nazaret (3.III.99)
La relación de Jesús con el Padre revelación del misterio trinitario (10.III.99)
«Conocer» al Padre (17.III.99)
El amor providente del Padre (24.III.99)
El Triduo santo de la pasión y resurrección del Señor (31.III.99)
El amor exigente del Padre (7.IV.99)
La orientación religiosa del hombre (14.IV.99)
Testimoniar a Dios Padre, en diálogo con todos los hombres religiosos (21.IV.99)
El diálogo con los judíos (28.IV.99)
El diálogo con los musulmanes (5.V.99)
El diálogo con las grandes religiones mundiales (19.V.99)
Escatología universal: la humanidad en camino hacia el Padre (26.V.99)
La muerte como encuentro con el Padre (2.VI.99)
Juicio y misericordia (7.VII.99)
El «cielo» como plenitud de intimidad con Dios (21.VII.99)
El infierno como rechazo definitivo de Dios (28.VII.99)
El purgatorio: purificación necesaria para el encuentro con Dios (4.VIII.99)
La vida cristiana como camino hacia la plena comunión con Dios (11.VIII.99)
El camino de conversión como liberación del mal (18.VIII.99)
Combatir el pecado personal y las «estructuras de pecado» (25.VIII.99)
Los pecados históricos (1.IX.99)
Los pecados que nos ofrece Cristo a través de la mediación sacramental de la Iglesia (8.IX.99)
El redescubrimiento del sacramento de la penitencia (15.IX.99)
La reconciliación (22.IX.99)
El don de la indulgencia (29.IX.99)
La virtud teologal de la caridad (6.X.99)
«No tendrás otros dioses delante mí» (13.X.99)
La virtud teologal de la caridad: hacia Dios y hacia el prójimo (20.X.99)
Enseñanza de la sagrada Escritura sobre las motivaciones del amor preferencial por los pobres (27.X.99)
El jubileo bíblico (3.XI.99)
Compromiso por la promoción de la mujer (24.XI.99)
Compromiso por la promoción de la familia (1.XII.99)
Compromiso por la edificación de la "civilización del amor" (15.XII.99)
María, hija predilecta del Padre (5.I.00)
María en el camino hacia el Padre (12.I.00)